Los últimos momentos fugaces del verano se nos han escapado y ahora nos estamos preparando para un otoño y un invierno con un clima más fresco y templado. Puede que esto no sea bueno para tu bronceado, pero es una muy buena noticia para tu piel. Durante los meses de verano, su rutina de cuidado de la piel probablemente incluyó muchas estrategias defensivas para combatir el daño que el sol de verano causó en su piel. Los meses de otoño y el clima más fresco significan menos batallas y más recuperación.
Si bien el otoño y el invierno presentan sus propios desafíos para mantener la piel sana y clara, el clima fresco que llega con el cambio de estación no es uno de ellos. De hecho, el aire fresco puede ser positivo para tu piel. Pasar tiempo al aire libre y sumergirse en las temperaturas frescas puede tener un impacto positivo en su piel. Este es el motivo.
- Poros más limpios: el aire fresco que pasa por la piel actúa como un tónico que limpia los poros y los mantiene menos visibles y refinados.
- Mejora de la circulación: a medida que bajan las temperaturas, es posible que comience a notar una mejor circulación, lo cual es excelente para reducir la hinchazón.
- Una mejor noche de sueño: ¿Quién no duerme mejor por la noche cuando llega el clima fresco? Una buena noche de sueño es una de las mejores cosas que puede hacer para que su piel esté sana y sana.
- Aire más limpio: el aire en otoño e invierno no está lleno de tantas toxinas y ozono como el aire en los meses de verano. Cuando el aire esté más limpio, su piel se beneficiará enormemente.
Hay personas que lamentan los próximos meses de invierno, pero esta época del año tiene aspectos positivos, especialmente para la piel. Si ya tienes una buena rutina de cuidado de la piel, los elementos climáticos de los meses de otoño e invierno te beneficiarán aún más.
Este otoño, pasa más tiempo al aire libre disfrutando de la belleza que te rodea y luego nota que tu piel estará mejor gracias a ello.